Pilar Cortés
10 Oct
10Oct

Debido a los frecuentes apagones y la escasez de agua, tras varios días de protestas juveniles en las principales ciudades del país - incluyendo la capital Antananarivo - los malgaches han obligado al presidente Andry Rajoelina a disolver su gobierno, siendo Rùfèn Zafisambo el nuevo primer ministro. Se estima que hay 22 muertos entre manifestantes y civiles. 

Andry Rajoelina es un empresario mediático y ex DJ que presidió Madagascar desde el año 2009 hasta el 2014 mediante un golpe de estado. Luego en 2018 fue elegido democráticamente y en 2023 fue reelecto en un contexto de baja participación electoral y de sospechas de fraude.

El ex primer ministro Christian Ntsay, quien dirigió el gobierno desde 2018 - y que paradójicamente llegó al poder para calmar los disturbios de aquél entonces -, fue disuelto de sus funciones el 29 de septiembre después de días de protestas en las principales ciudades del país por causa de los frecuentes apagones y la escasez de agua. Es por estoque se produjeron las mayores manifestaciones lideradas por jóvenes en años: lo que comenzó como marchas mayoritariamente pacíficas pronto degeneró ante la decisiva intervención de las fuerzas de seguridad.

Se desplegaron gases lacrimógenos, se impusieron toques de queda y surgieron informes de palizas, arrestos masivos e incluso el uso de munición real. Cuando cesaron los disturbios, al menos 22 personas habían muerto y más de 100 habían resultado heridas, según funcionarios de derechos humanos de la ONU.

"Ante la actual inestabilidad que el país enfrenta, caracterizada por la frustración y el enojo derivados de los cortes eléctricos e hídricos, he escuchado el llamado de los jóvenes y entiendo totalmente sus preocupaciones y frustraciones", dijo el presidente Rajoelina la semana pasada al anunciar la disolución del Gobierno. 

Con respecto al nuevo primer ministro, Rùfèn Zafisambo - quien anteriormente ocupó altos cargos militares y administrativos - recibió el mandato para llevar a cabo una «profunda renovación de la administración estatal». Zafisambo se formó en Argelia, donde se licenció en administración militar en Orán en 1989; también estudió en la academia militar de Antsirabe y más tarde en el CEDS Madagascar, un centro de formación para altos funcionarios públicos y líderes empresariales.

Tras afirmar que el objetivo del nuevo Gobierno es "satisfacer las aspiraciones de la gente", Rajoelina dijo que "su principal prioridad será restablecer el suministro eléctrico e hídrico en el menor tiempo posible".

 Al mismo tiempo, el 3 de octubre el presidente afirmó que había intervención extranjera en la situación política interna de Madagascar. La Unión Africana y la Comunidad de Desarrollo de África Austral (SADC) condenaron los disturbios y llamaron a las partes a entablar un diálogo para ‘’restablecer la tranquilidad’’ 

Siendo que Madagascar fue - como otros 18 países africanos - colonia francesa entre el período de 1897 y 1958, esto le ha causado severos conflictos económicos y políticos. En el plano económico, Madagascar se enfrentó (y continúa enfrentándose) a la dependencia de la economía francesa y a la debilidad de sus estructuras industriales. Esta dependencia limitó las posibilidades de desarrollo de la isla y contribuyó a su pobreza.

En el plano social, la colonización francesa también tuvo consecuencias duraderas. Los pueblos indígenas fueron discriminados y marginados por los colonizadores franceses ,lo que generó desigualdad y tensiones entre las diferentes comunidades de la isla. 

Pero al mismo tiempo, su pasado de resistencia y de lucha por la independencia continúa vivo en búsqueda de una vida digna para la sociedad malgache: cada 29 de marzo, día feriado en Madagascar, se recuerda la insurrección independentista que enfrentó al poder colonial francés en 1947. En este día se organizan ceremonias en los diferentes lugares emblemáticos del levantamiento, en donde centenares de hombresarmados con lanzas y machetes atacaron el campo militar de Moramanga y las ciudades costeras de Manakara y Vohipeno.

Los insurgentes acometieron tanto a las personas europeas como a aquellas consideradas pro francesas, y las fuerzas coloniales reaccionaron reprimiendo a través de arrestos, ejecuciones extrajudiciales, torturas y masacres masivas. La insurrección terminó en diciembre de 1948 y el poder colonial responsabilizó rápidamente a los líderes del Movimiento Democrático de la Revolución Malgache, a pesar de que ellos no habían participado ni incentivado la rebeldía. A tres diputados del movimiento les quitaron la inmunidad parlamentaria y así se habilitó un juicio, iniciado en julio de 1948,que terminó con penas de prisión, de muerte o trabajos forzados. Las penas, luego, fueron conmutadas para los diputados malgaches. 


Por Pilar Cortés para Data Urgente



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