24 May
24May

Alaa al-Najjar recibió los cuerpos sin vida de sus nueve hijos en el Complejo Médico Nasser donde trabaja. La tragedia revela la brutalidad israelí contra las familias palestinas.

En una escena que condensa el drama humanitario en Gaza, la pediatra Alaa al-Najjar recibió los cuerpos sin vida de sus nueve hijos en la sala de urgencias del Hospital Tahrir, donde ejerce.El impacto directo de un bombardeo israelí contra su vivienda en Khan Yunis, al sur de la Franja, ocurrió el sábado por la mañana.

Alaa, especialista en pediatría en el Hospital Tahrir dentro del Complejo Médico Nasser, salió temprano de casa junto a su esposo, el también médico Hamdi al-Najjar, quien la acompañó hasta su jornada habitual atendiendo a pacientes infantiles.Nada le hacía presagiar que ese turno terminaría con la llegada de sus propios hijos al hospital, envueltos en sudarios blancos.

Los nombres de una tragedia familiar

El Ministerio de Salud de Gaza, a través de su director general Munir al-Barsh, confirmó que los nueve menores fallecidos eran Yahya, Rakan, Ruslan, Jubran, Eve, Rifan, Saydin, Luqman y Sidra.

El mayor tenía apenas doce años. Un décimo hijo, Adam, logró sobrevivir con heridas graves y permanece ingresado, al igual que su padre, en la unidad de cuidados intensivos.

Alaa, quien durante años consoló a madres dolientes y cuidó de los más pequeños, enfrentó ahora el horror más absoluto: perder a toda su familia en el lugar donde entrega su vocación.“Todos los niños de Gaza son mis hijos… pero estos eran mi vida”, expresó la doctora entre lágrimas, según relataron sus colegas.

El personal médico del complejo describe la escena como insoportable, con todo el equipo intentando consolar a una colega devastada mientras continúa la presión de las emergencias.

Personal médico, blanco directo

Munir al-Barsh denunció que el personal sanitario en Gaza se ha convertido en objetivo, tanto en sus lugares de trabajo como en sus hogares.Subrayó que la escena vivida por la pediatra Alaa refleja con crudeza lo que atraviesan los médicos en la Franja.

“El dolor que experimentan los sanitarios palestinos no puede describirse con palabras. Esta guerra ha convertido a cada casa en un posible blanco y a cada niño en una víctima potencial”, lamentó."Israel" intensificó esta semana sus bombardeos sobre zonas residenciales en Khan Yunis y Rafah, en el sur del enclave.

Organizaciones humanitarias han alertado sobre el aumento de ataques contra viviendas familiares, hospitales y refugios improvisados, lo que ha provocado un repunte alarmante en el número de víctimas civiles. La historia de la doctora Alaa resume una realidad que se repite cada día: la destrucción sistemática de familias palestinas.

Según datos del Ministerio de Salud en Gaza, más de 16 mil 503 niños han muerto desde el inicio de la ofensiva israelí en octubre de 2023.El impacto de esta violencia se multiplica cuando afecta a quienes dedican su vida a salvar otras.La comunidad médica gazatí, pese a las pérdidas personales y el colapso del sistema hospitalario, sigue atendiendo a los heridos y denunciando la agresión continuada contra la población civil.


AlMayadeen

Comentarios
* No se publicará la dirección de correo electrónico en el sitio web.