Las autoridades israelíes han iniciado una operación de búsqueda a gran escala, incluyendo buzos, para localizar el dispositivo móvil perdido que contiene información “vital” y sensible sobre el caso de tortura a prisioneros palestinos.
Las fuerzas de seguridad israelíes han iniciado una búsqueda intensiva del teléfono móvil de la fiscal militar del ejército, Yifat Tomer Yerushalmi, tras ser arrestada por su presunta implicación en la filtración de un vídeo que muestra la tortura de prisioneros palestinos en la prisión de Sde Teiman.
La fiscal reportó la pérdida de su dispositivo, el cual, según los medios israelíes, contiene información clasificada y vital del ejército, lo que ha generado una grave alarma entre las autoridades.
La operación para encontrar el teléfono se ha extendido hasta las costas de Hertzelia, donde buzos de la marina han sido desplegados para rastrear el fondo marino. Las autoridades sospechan que la fiscal pudo haber arrojado el teléfono al mar intencionadamente.
Encontrar el dispositivo se considera crucial no solo por la información sensible que contiene sobre el caso de tortura, sino también para identificar a otros posibles sospechosos vinculados a la filtración que aún no han sido detenidos.
Mientras el ejército y el servicio de seguridad interno (Shin Bet) se mantienen al margen sin hacer comentarios, la desesperación por recuperar el teléfono ha llevado a un empresario israelí a ofrecer una recompensa de 100,000 shekels (más de 30,000 dólares) a quien lo encuentre.
IRNA