El rol de Nigeria y Francia en el fallido golpe en Benín
El 7 de diciembre se produjo un intento de golpe de Estado en Benín a manos de Pascal Tigri, teniente coronel de rango medio del ejército nacional. ¿Por qué no pudo concretarse?
Durante la madrugada del domingo en Cotonú - ciudad beninesa de gran importancia económica -, el coronel Pascal Tigri junto a un grupo de militares tomaron la residencia del presidente de Benín Patrice Talon, en donde anunciaron a través de la televisión nacional la destitución del gobierno, la suspensión de la Constitución y la creación del Comité Militar para la Refundación, del cual Tigri se declaró presidente1.
Sin embargo, el intento de toma del poder fue sofocado por fuerzas nigerianas y francesas, quienes operaron de forma aérea y terrestre bajo órdenes del presidente francés Emmanuel Macron, según denuncias del Partido Comunista de Benín2,quienes declararon que ‘’los golpistas basaron principalmente su anuncio en el descontento popular con el gobierno.
En realidad, el golpe del 7 de diciembre es la consecuencia lógica de la fascista mala gestión y dictadura del régimen de Talon, marcada por numerosos derrocamientos constitucionales desde que llegó al poder en 2016. Es el resultado de una constitución autocrática que dificulta cualquier práctica democrática y la expresión de la soberanía popular.
Mientras este régimen continúe, es probable que tales sucesos vuelvan a ocurrir’’. Cabe señalar que Nigeria - al igual que Camerún - es uno de los países africanos que mantiene vínculos estrechos con sus ex colonizadores (Francia y la OTAN), lo cual explicaría su colaboración para impedir la toma del poder por parte del Coronel Tigri.
Para esclarecer los motivos de los hechos se hace necesario ponernos en contexto: Benín es una estrecha franja de tierra que se extiende de norte a sur en África Occidental, limitando con Togo al oeste, Burkina Faso y Níger al norte, Nigeria al este y la Bahía de Benín al sur 3.
Sus países limítrofes son de gran importancia para comprender las disputas políticas y económicas de la región: tanto Burkina Faso como Níger (sumando a Malí, quienes integran la Alianza de los Estados del Sahel)son territorios atravesados por procesos de emancipación colonial cuyo origen se dio a través de golpes de estado con respaldo popular alrededor del 2020.
Estos golpes tuvieron como fin expulsar a las tropas francesas, nacionalizar recursos,establecer una moneda propia y mejorar el acceso a derechos básicos para supoblación, entre varios otros objetivos.
Dichos territorios son una amenaza para países como Nigeria y Benin, cuya injerencia occidental intenta mantenerse a flote bajo el ‘’bastión de la democracia’’, democracia que hasta el momento ha mantenido a ambos países dentro de los que peor calidad de vida tienen sus habitantes, según Datos Macro 4.
Con respecto al actual presidente beninés, Patrice Talon es un político cuyo origen radica en la industria del algodón, la cual le sirvió como trampolín para expandir sus inversiones a hoteles, servicios portuarios (su empresa gestionaba el puerto de Cotonú) y bancos en Benín, llegando a concentrar grandes puntos estratégicos de la economía del país, concentración que lo llevó a ser clasificado en la revista Forbes como la 15a persona más rica del África subsahariana en mayo del 2015.
En gran medida su ‘’éxito’’ económico se debe a la privatización de las 18 industrias algodoneras que antes pertenecían al Estado, de las cuales 15 pasaron a manos de Talon.
Unos años antes, se exilió en Francia debido a acusaciones de intentar envenenar al presidente Yayi Boni en 2012.
Su primer mandato se produjo en 2016, y en 2021 fue reelecto. Desde entonces, varias figuras de la oposición han sido condenadas a largas penas de prisión en circunstancias cuestionables - como fue el caso de Joël Aivo y Reckya Madougou, quienes permanecen encarcelados desde finales de 2021 tras ser condenados a 10y 20 años de prisión -, produciendo un deterioro de los derechos humanos y del derecho a huelga en Benín 5.
Hasta el momento hay 13 detenidos por el intento de golpe, mientras que Pascal Tigri - líder del operativo - logró escapar junto con otro miembro6.
La figura de Tigri sigue causando revuelo debido a que hasta ahora no existe información clara sobre el nivel de apoyo interno que Tigri posee dentro de las fuerzas armadas. Algunos analistas consideran que se trata de un golpe frágil, quizás improvisado, basado más en una demostración de fuerza mediática que en la toma real del aparato estatal 7, mientras que otros mantienen expectativas de una posible revolución en el territorio del Sahel que se suma a la lista de países que se dirigen hacia la emancipación colonial definitiva, como lo están haciendo BurkinaFaso, Níger y Malí. ¿Se sumará Benín a la Alianza de los Estados del Sahel?
Por Pilar Cortés para Data Urgente
2 https://haizeagorriak.wordpress.com/
3 https://www.countryreports.org/
4 https://datosmacro.expansion.com/paises/benin