Los bombardeos de las FAR dejaron a los médicos sin posibilidades de atender el brote de cólera que afecta a la población de Jartum.
Seis personas murieron y otras resultaron heridas por el bombardeo con artillería pesada de las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) contra dos hospitales y barrios residenciales en la ciudad de El Obeid, en el estado de Kordofán del Norte, en el centro de Sudán, según una fuente militar.
La administración del hospital Al-Daman, afectada por el bombardeo, anunció su salida de servicio "hasta nuevo aviso", mientras los médicos realizan esfuerzos para contener un brote de cólera en la capital sudanesa, Jartum.Por su parte, el director general de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, expresó su "horror" por el ataque e instó a detener las agresiones contra instalaciones sanitarias y proteger todas las infraestructuras y trabajadores de la salud.
La epidemia de cólera se propaga en Jartum, donde decenas de personas fallecieron esta semana, y los médicos enfrentan dificultades para tratar a los pacientes en medio de la escasez de suministros y la rápida propagación.Al respecto, el doctor Hamad Adel, de Médicos Sin Fronteras (MSF), dijo a la AFP desde el hospital Bashair: "Utilizamos todos los medios disponibles para limitar su propagación y tratar a los pacientes infectados".
El cólera es una enfermedad endémica en Sudán, pero la infección se ha vuelto más frecuente y virulenta debido al colapso de las instalaciones sanitarias y los daños causados por la guerra.
En un contexto relacionado, el director del Comité Internacional de Rescate (IRC) en Sudán, Etizaz Yousif, afirmó que el país está al borde de una catástrofe sanitaria pública generalizada.
Por otro lado, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de las Naciones Unidas anunció que una de sus instalaciones resultó alcanzada y sufrió daños significativos debido a bombardeos repetidos de las FAR.