En una foto tomada en las instalaciones de Embraer en Gavião Peixoto, en el interior del estado de São Paulo, se puede ver a los primeros dos Super Tucano a ser entregados en mayo próximo a la Fuerza Aérea Paraguaya.El 19 de noviembre de 2024, Paraguay anunció la compra de seis cazas ligeros Embraer EMB-314 Super Tucano, en una transacción de R$ 600 millones financiada por el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) de Brasil.
El A-29 paraguayoLa versión del Super Tucano adquirida por Paraguay es un modelo de exportación que cuenta con paneles de instrumentos totalmente digitales con dos pantallas multifuncionales de cristal líquido a color de 15,24x20,32cm y una pantalla de 13,76x17,52cm; paquete sintético que amplía las capacidades de formación a bordo; lanzadores de chaff/bengalas; blindaje externo; telémetro láser; capacidad para emplear bombas guiadas por láser; cámara que proporciona imágenes convencionales y térmicas MX-15; y anteojos de visión nocturna.
Inicialmente, la flota utilizará armas convencionales, habiendo adquirido 12 lanzadores para siete cohetes LAU-32 de 70 mm cada uno; además de bombas de uso general.El contrato incluye apoyo logístico con repuestos y mantenimiento programado, así como estaciones para la planificación de misiones, instrucciones y de briefing.
Con el Super Tucano, la Fuerza Aérea Paraguaya (FAP) entró al siglo XXI porque, además de ser el mejor turbohélice de su categoría, el avión está equipado con sistemas avanzados y muy modernos que se ven en los cazas de 4º generación como head up display; sistema hands on throttle and stick, que concentra los controles principales en el acelerador y el joystick del avión; datalink; comunicación cifrada y segura e incluso la arquitectura de la cabina que es compatible con estos aviones de combate supersónicos.Con el Super Tucano, la FAP dará un salto cualitativo en la protección del espacio aéreo del país, especialmente contra vuelos ilícitos que transportan drogas, armas o contrabando, aumentando así la seguridad interna del país. A través de los sistemas Super Tucano, la FAP comenzará a desarrollar nuevas doctrinas y ampliar sus capacidades operativas.
En la línea de vueloLos seis A-29 están programados para entregarse en mayo de 2025 y lucen un camuflaje de dos tonos al estilo del sudeste asiático: verde y arena en la parte superior y gris medio en la parte inferior de los cazas.La aeronave tendrá matrícula FAP 1101 y FAP 1106 y equipará al Grupo Aerotáctico FAP de la Brigada Aérea 1, en Luque, en la Base Aérea Ñú Guasú. Aún no se ha decidido qué unidad operará la aeronave, que podría ser el 1° Escuadrón de Caza “Guaraní” que cuenta con las escuadrillas “Orion” y “Centauro” (y que en el pasado voló con el AT-26 Xavante) o el 2º Escuadrón de Caza “Indios” con los escuadrones “Taurus” y “Scorpio” (que recibió el AT-33A). Sin embargo, la FAP ya ha definido que la misión principal de estos cazas será la vigilancia del espacio aéreo contra aeronaves en vuelos ilegales, asistencia en vuelo y patrullaje. En segundo lugar, realizarán ataques, apoyo aéreo cercano y reconocimiento.
Fuente: Pucará Defensa