El ministro galo de Asuntos Exteriores, Jean-Noël Barrot, confirmó la medida como respuesta a la detención en París de tres argelinos, incluido un oficial consular, acusados de secuestro y terrorismo.
La tensión diplomática entre Argelia y Francia escaló en las últimas 48 horas tras la orden de expulsión de 12 funcionarios galos emitida por las autoridades de Argel.
El ministro de Asuntos Exteriores, Jean-Noël Barrot, confirmó la medida como respuesta a la detención en París de tres argelinos, incluido un oficial consular, acusados de secuestro y terrorismo.
Barrot urgió a Argelia a revertir la decisión y advirtió una represalia inmediata si consuma la expulsión.
El conflicto surgió semanas después de su visita a Argel, donde buscó recomponer la relación bilateral, históricamente marcada por tensiones poscoloniales.
Ambos países prometieron entonces construir una "asociación entre iguales", pero el caso judicial reavivó las fricciones.
Las autoridades de la nación europea imputaron a los detenidos por el presunto secuestro en 2024 de Amir Boukhors, opositor al gobierno argelino, en un suburbio parisino.
A su vez, los imputados enfrentan cargos por conspiración terrorista y permanecen en prisión preventiva.El nuevo episodio refleja la fragilidad de los vínculos entre los dos Estados, pese a los intentos de reconciliación.
Conforme a algunos analistas, el caso judicial podría complicar el diálogo sobre migración, energía y memoria colonial.
AlMayadeen